Si pensamos en deportes siempre lo asociamos a una pelota. Es cierto, hace años era así y ahora mismo los deportes que cuenta con más adeptos son donde interviene este elemento. Me estoy refiriendo por supuesto al fútbol, al baloncesto, al balonmano o incluso aunque tenga otra forma al rugby. Con sus normas diferentes, pero al final, es este elemento el que tiene todo el protagonismo. Pensamos que, como ocurría en el colegio, si no tenemos balón no se juega. Y es que todavía no se ha inventado nada donde haya un balón imaginario. Aunque como curiosidad, os diré que hubo un entrenador Benito Floro, que en el Real Madrid, jugaba partidos con un balón imaginario.
Luego están otros deportes donde la raqueta es la principal protagonista. Hay unos cuantos como el famoso tenis con nuestro campeón Rafa Nadal, el pádel donde también España cuenta con grandes jugadores, u otros menos conocidos como el bádminton o al que se jugaba de toda la vida en los pueblos, el frontón. Incluso la modalidad de squash también tuvo mucho éxito hace años en nuestro país.
Y así, llegamos al tema de hoy, luego existen otra serie de deportes donde las cuerdas son las grandes protagonistas. No somos conscientes del gran sector e importante que hay detrás para poder hacer estos deportes. Sobre todo porque hay que tener en cuenta la seguridad, y por eso, cobra una gran importancia. Hay varios deportes en los que se utilizan cuerdas como herramienta principal, entre ellos tenemos.
Escalada
Seguro que es el primero que se te ha venido a la memoria. Los escaladores utilizan cuerdas para asegurarse mientras suben por las rocas o paredes de un rocódromo. La cuerda se amarra a una pieza de anclaje y el escalador se asegura a ella mientras sube. Ahora bien, como nos indican desde Cuerdas Valero, no valen todas. Para realizar estos deportes hay que usar cuerdas especificas que nos ofrezcan mucha seguridad, y es que nos podemos estar jugando la vida. En el caso de escalada la que nos recomiendan es el modelo Paracord.
Rapel
No, no quiero la típica broma con el vidente. El rapel es un deporte y de los más divertidos que podemos encontrar. Es el más famoso que se hace cuando hay una despedida de soltero de por medio. En este caso, los practicantes de rapel utilizan una cuerda para descender desde una altura. Se amarran mediante un arnés a la cuerda y controlan el descenso con la mano. Como hemos dicho con la escalada, es fundamental contar con una cuerda que responda a todas las garantías de seguridad
Slackline
El slackline es un deporte en el que se camina sobre una cinta elástica llamada slackline. Soy consciente de que no mucha gente lo puede conocer, pero también os digo que una vez que se sabe de su presencia, es complicado sacárselo de encima. En este deporte, la cuerda se tensa entre dos anclas y el deportista camina sobre ella, tratando de mantener el equilibrio. Un deporte que seguro que dentro de unos años incluso podría llegar a ser olímpico. Ya os lo adelanto
Bungee jumping
Consiste en saltar desde una altura conectado a una cuerda elástica. La cuerda se estira y el deportista rebota antes de detenerse en el aire. Seguro que está pensando que esto es lo que se conoce toda la vida con el nombre de puénting, pues sí, llevas razón. Pero ya sabes que con el paso de los años, las cosas se modernizan y gusta llamarlo de otra manera.
Pole dance
En esta disciplina deportiva se utilizan barras verticales y cuerdas para realizar acrobacias y movimientos en el aire. Y sí, aunque te pueda recordar a una barra americana de toda la vida, este deporte cuenta cada vez con más adeptos y os digo que se va a poner muy de moda. El baile en barra, pese a sus inicios eróticos en clubes nocturnos tanto para hombres como para mujeres, al pasar de los años hoy en día es considerado en la actualidad como una forma reconocida de ejercicio y puede ser utilizado como una gimnasia aeróbica y anaeróbica en sesiones
Ya has visto que en todos estos deportes, el uso de cuerdas es esencial para garantizar la seguridad de los deportistas y son manejadas por profesionales para minimizar el riesgo de lesiones graves. Por eso, lo mejor es ponerse en manos de profesionales cuando vamos a elegir el material para practicarlo.